Cristosende está situado en el corazón de los viñedos de la Ribeira Sacra, que es una denominación de origen. Se puede caminar por muchos senderos que cruzan las viñas y es posible ver la gente trabajando en las terrazas, muchas de las cuales fueron construidas por los romanos.
El vino de la región se hace principalmente con la uva Mencía para el tinto y para el blanco se usa Albariño y Gordello. Hay muchas bodegas que pueden visitarse (en casi todas hay que concertar una cita con anticipación) donde se pueden degustar y comprar estos excelentes vinos.
Gay diversos edificios antiguos que se pueden visitar, iglesias y monasterios de estilo románico y el puente romano de Villarino Frio que se ha conservado y está en perfecto estado. Al mirarlo uno casi puede escuchar la marcha de las legiones romanas.
El pueblo de Cristosende descansa sobre una colina con vista al Río Sil, que corre por el Cañón del Sil, cuyo embalse fue construido entre 1945 y 1965. El paisaje de este cañón es realmente espectacular en cualquier época del año. Una pequeña balsa y un catamarán grande navegan dos veces al día por sus aguas, casi todo el año – un paseo realmente imperdible. En el Sil, también hay sitios donde se puede alquilar canoas. Nuestros visitantes, en ocasiones, pueden usar nuestra canoa, (enteramente bajo su responsabilidad), y también hay tres bicicletas disponibles. (¡por favor traer cascos!)
También hay un tren de carretera turístico que recorre parte del cañón y sigue a lo largo de una ruta de viñedos. Nadar en el Sil es una experiencia increíble, tiene aguas profundas pero tibias durante el verano. Desde nuestra casa hasta el acceso más cercano, hay aproximadamente 2 kms.